Barcelona, 21:43 hrs... un día cualquiera del verano de 2009
_¿Por cuál de los libros vas?
Me pregunta mi amigo mientras esperamos en la fila para entrar al cine.
_¿De qué hablas… cuál libro?
Le respondo haciéndome el desentendido, pero sabiendo (instintivamente) que se refería a la saga Millenium, pues teníamos el cartel promocional de la película enfrente.
_¡Hombre, los de Larsson!...
Me responde mi interlocutor con cara de incredulidad como queriendo decir “no estás en la movida”.
¡Ahh, si!... Por ninguno.
Respondo en seco y haciéndome el distraído.
... (Cinco segundos de silencio y cara de perplejidad).
_¡Pero que dices!... si hasta han sacado la película y todo!
Me contesta entre serio e incrédulo.
_Ya, pero yo no los voy a leer…
Le termino respondiendo con tono de disculpa... Un tono que luego me hizo sentir mal conmigo mismo, pues la verdad es que no tengo por qué sentirme mal por no leer a Larsson, como si de una obligación se tratase. Así que no tardé en añadir:
_Pues mira... La verdad es que empecé a leer el primero, ese de los hombres que no amaban y tal… y te puedo decir que no estaba mal. Pero luego me di cuenta de que estaba leyendo el libro por el interés mediático creado en su entorno, y no porque realmente me gustase… así que justo en la página 101 lo dejé y lo devolví a la biblioteca…
Hice una pausa para enfrentar su genuina mirada de incredulidad... Luego tomé aire y agregué...
_De hecho no pienso terminarlo... ni leer nada más de ese señor… tal vez vaya a ver la peli.
Terminé diciendo, lo cual me hizo sentir en cierta forma satisfecho... A partir de allí, llegó mi mujer (que había ido a comprar bebidas) y la fila empezó a moverse, por lo que comenzamos a andar hacia la sala... fin de la conversación…

En fin, conversación aparte… Reconozco que el estilo de Larsson es relativamente bueno y no niego que la trama tenga su “feeling” (aunque no me atrevería a asegurarlo), pero no considero que sea un escritor “tan” bueno como para haber recibido tanto furor mediático.
Estemos claros, Larsson es un escritor “normalito” que por alguna razón del destino y por el entramado de su extraño final (justo en la publicación de su primer libro), se hizo con la atención del público. Pero de allí a decir que es un escritor “fantástico” (como luego me dijo mi amigo) hay mucho trecho.
Así que pueden seguir a mí alrededor hablando de Larsson y comentando “lo bueno” que es, que yo seguiré diciendo que no lo he leído... Aunque siga recibiendo expresiones de incredulidad…
Seguiré leyendo a otros autores, que son menos mediáticos, pero que si son buenos escritores… de verdad.
Aclaro que no tengo nada en contra de Larsson, pero si de la gente sin personalidad que hace las cosas porque las hacen los demás, y porque sienten la necesidad ser aceptados/as en esas conversaciones insulsas que se generan alrededor de temas como éste, y cuyo origen es la moda de turno.
Pues no, no voy a leer a Larsson.
Estoy contigo, yo tampoco pienso leerlo, por motivos similares, eso de que nos empujen a consumir sólo por que le dan tanta publicidad, no va conmigo. Tal vez algun día acabe leyendolo, pero será por que yo quiera hacerlo, no por que está de moda y hay que hacerlo en este momento. De la pelicula ni pienso ir a verla al cine, es una de esas candidatas a descargarse directamente, sin pasar por el videoclub.
Me pasó algo similar con el Código DaVinci, hasta lo tengo en la colección, pero aun no lo he leído. A la gente que me comentaba que nunca se habian sentido tan atrapados por un libro, les deja el «Juego de Ender», para que vieran que existe vida antes de la publicidad. Todos coincidieron en que Ender les atrapó mucho más, hasta el punto incluso de hablar sólos y animarlo en el autobus.
Sinceramente no puedo decir si es un buen escritor o no. No he leído ni una línea y aunque lo hubiera hecho lo único que podría decir es si me gusta, si me mueve, si se lee bien, si provoca… Reconozco que mantenerse «limpio» de influencias de consumo tiende a ser utópico (y loable).
He visto las portadas, sé que tiene una peli, pero la verdad… prefiero leer a Khalil Gibrán, Schlink, Garcilaso o Pessoa (por poner ejemplos dispares) y para aprender de Marketing me leo otras cosas.
Tampoco me importa demasiado si es un buen escritor o no. Podría, si quisiera interesarme, tomándolo como objeto de estudio, en plan sociológico, a la manera de los antropólogos.
O ni eso.
Reconozco que a veces quiero sentirme masa y pienso en leerlo o en ver Gran Hermano. ¿Quién no lo hace? Ya avisaré cuando le haga una crítica lieraria.
Hola Bergonzini:
Creo que han jugado con nuestras espectativas y muchos aún no se han dado cuenta dejándose arrastrar como ovejas por las manipulaciones que nos infligen los medios. Muy cierto, con el Código Da Vinci paso igual.
Coincido en que los libros de Orson Scott (creo también tiene una trilogía ¿no?) son de una lectura mucho más interesante y aunque utiliza mucho la ciencia ficción, las historias realmente enganchan. El Juego de Ender me recordó a Manuel de Pedrolo y su Mecanoscrit del Segon Origen… ¡fantástico!
Gracias por pasarte y comentar.
Hola Marta y bienvenida al blog:
Interesante el punto de vista que planteas… más distante e informal en relación al bombardeo mediático.
Intuyo que ya te has formado un carácter intelectual y escoges a conciencia lo que vas a leer, me encanta, pues demuestra que no eres arrastrada por las masas.
Espero seguir viéndote por aquí…¡Nos leemos!
Saludos
SM
Yo me incluyo también entre los que aún no hemos leído a Larsson.
Reconozco que en varias ocasiones he estado tentado de comprar el primero, para ver en qué consistía el «fenómeno mediático», pero al final, supongo que por escapar un poco de esa sensación de «lo hago porque todo el mundo lo hace», y por no estar plenamente convencido, lo dejé pasar. Quizás cuando tenga más críticas de mis conocidos al respecto, o una vez que se pase todo este boom, me decida.
De todos modos, los best-seller son curiosos en este sentido, no tienen por qué ser la mejor literatura del mundo, pero en un momento dado sí pueden ser adictivos, y engancharte a la trama, tampoco eso es malo en sí mismos, si te entretienen ya han cumplido una función, y no es poco, aunque su calidad no sea la máxima.
Tampoco hay que rechazarlos sin más por ser best-seller, yo acabo de terminar El juego del Ángel, de Ruiz-Zafón, y me ha parecido un buen libro, al igual que La sombra del viento.
En su día también leí el Código da Vinci, y sin ser una gran novela, me tuvo entretenido unos días, así que eso tampoco está mal.
Un saludo
Pablo Rodríguez
Hombre SM que quieres que te diga. El hecho de que te leas un libro no implica necesariamente que seas un hombre sin opinión o bien que te dejes arrastrar por la mas. Si nos fijamos hacemos muchas cosas que también hace otra mucha gente. Tenemos un blog, cuenta en faceook, cuenta en twitter. Sin embargo esto no es ni bueno ni malo intrínsecamente. Por tanto yo si que voy a leer los libros de Larsson. De hecho me regalaron el primero, me lo leí (debo reconocer que mi pensamiento es que no es para tanto, que tampoco engancha mucho más que otros cientos de libros que me he leído), pero no tiene nada que ver. Quizás la única conclusión correcta que se pueda obtener es que la gente deberíamos leer mucho más, y darnos cuenta que hay muchos libros buenos por el mundo que merece la pena leer. Si el impulso mediático sirve para fomentar la lectura pues bienvenido sea.
En fin que si te fijas, todo puede ser criticable, tanto el que te los leas como el que no.
Yo si me voy a leer a Larsson.
Saludos
Hola Pablo:
Es mi opinión, y cada quién tendrá la suya… pero empecé a leerlo y pensé “no era para tanto” como dije, un autor normalito, con una historia normalita, pero muy mediática. Yo prefiero a Stephen King y no han hecho tanta fanfarria con él.
Concuerdo en que no hay que rechazar a los best-seller, y es muy posible que algún día si no tengo nada que hacer o si me lo regalan, pues lo termine leyendo, pero no será porque quiera estar en la movida, sino por entretenerme. Gracias por pasarte y comentar.
Hola Arturo:
Vale si, estoy de acuerdo en que leer un libro en particular no implica necesariamente que alguien no tenga opinión o bien que se deje arrastrar por la masa, pero leerlo porque todas las personas alrededor lo hacen o porque todos hablan de ese libro en particular si lo es. Seguramente, y si no hubiese sido tan mediatizado, y en tu caso si no te lo hubiesen regalado (Ojo, que la escogencia del regalo es producto también de la influencia de los medios), lo hubieras pasado por alto, como tantos otros libros que salen a la luz y a la par, pero que nunca llegamos a conocer (y me incluyo). Por otro lado, el impulso mediático no es que fomente la lectura, sino que fomenta “un tipo” de lectura, al que tiene a alguien interesado detrás, que no es lo mismo.
Muchas gracias por tu comentario y por la discrepancia, pues no sólo se añaden puntos de vista al debate, sino que se enriquece el post con nuevas ideas y perspectivas… En cualquier caso, espero que disfrutes el libro, pues tampoco puedo afirmar que es malo.
Saludos
SM
Hola SM. Yo me he leído los tres libros (bueno, del tecero me queda poco) y he tardado una semana en ello. Efectivamente el autor – como escritor – es normalito, pero la historia, de normalita no tiene nada. En cualquier caso, Stephen King (ya que lo pones de ejemplo), tampoco es que sea un prodigio literario . Tengo que añadir, además, que tampoco he participado en conversaciones de más de un minuto sobre el/los libro/s, ni antes, ni después de leerlo. Esta es la primera.
Por último, como apunte, deciros que, además de la trilogía, en lo que va de verano he leído a Vargas LLosa ( para mi un ladrillo difícil de digerir), Idea Villariño, Benedetti, Emile Zola, Katherine Neville . Y, por otro lado, Freakonomics y el Economista Camuflado. Es decir, una lista bastante variada y dispar.
Así que nada más, ahí queda mi comenario. Por supuesto, recomiendo la trilogía de Larsson ( sobre todo el segundo libro).
Saludos
>>»Aclaro que no tengo nada en contra de Larsson, pero si de la gente sin personalidad que hace las cosas porque las hacen los demás, y porque sienten la necesidad ser aceptados/as en esas conversaciones insulsas que se generan alrededor de temas como éste, y cuyo origen es la moda de turno»
Bueno… es la otra cara de la misma moneda… no hacer las cosas porque los demas las hacen, aunque nos apetezca.
Arturo lo ha expresado perfectamente.
Saludos
Hace años me pasó lo mismo con “El nombre de la rosa”. Te cuento un secreto: me lo leí tiempo después de su “boom”. Me gustó, por qué no decirlo, pero de ahí a que fuera considerado una obra maestra…
Me gusta escribir (he publicado un par de novelas cortas; la url de mi blog literario es http://www.molinacanabate.blogspot.com/ ) y, quizá por ese motivo, tengo mucho respeto a quien tiene redaños para ponerse delante de una página en blanco y someter su obra a “juicio público”.
Por el contrario, me produce risa la persona que, preso de las modas, te mira con cara de extraterrestre porque no hayas leído cierto libro.
La lectura es un acto íntimo, un momento muy personal. Para que un texto te enriquezca debes abrirte buscando empatía con el autor y con sus ideas. Por lo tanto, las imposiciones, paradójicamente, van en contra de la propia lectura, en contra de la libertad, en contra del placer de leer.
Un saludo
Yo me leí el primero en su momento, en el 2005, y me gustó, aún no era mediática. Luego la segunda en el 2008 y hace un mes la última.
El personaje de la chica tiene mucha fuerza y gancho. Es el alma de la trilogía.
Pero como muy bien haces, si yo tuviera que leerlos ahora, tampoco lo haría. La fama le quita frescura. Espera unas décadas y seguro que te gusta…
Un abrazo.
Pues imagínate que no sabía de Larson, ahora me entro la inquietud de saber más de él, si lo leo te cuento ja.
Tampoco he visto esa película, ando algo atrasado con lo que se lee entre tus amistades.
Saludos
Para mantener un criterio personal parece conveniente ailarse de todo tipo de ruido provocado y así, desde la (ficticia) independencia, decidir qué hacemos. Lo mismo vale para Larsson que para cualquier otro elemento más o menos mediático en el ámbito del ocio, la música, la literatura o cualquier otra manifestación artística.
¿1 millón de personas no pueden estar equivocadas? Nunca me gustó ese razonamiento por sesgado. Pueden estar perfectamente acertadas…según sus criterios. Hay cientos de ejemplos que no comparto: los discos de Bisbal/Ricky Martin, el tsunami Michael Jackson, los códigos DaVinci, los triunfitos, los futbolistas que «ganan» sin jugar al fútbol o el desinterés por la F1 si no gana Alonso. Y seguro que no soy el único, vamos.
Yo no le voy a leer, y no por tener un sarpullido anti-Larsson. Sobretodo porque mi cola de libros pendientes está ya abarrotada y 1.500 páginas quedan muy lejos de mis posibilidades actuales. Así que nada, sin estrés ni angustia tomo consciencia que vivimos etapas distintas los libros del Sr. Larsson (y tantos otros) y yo.
Yo estoy recién liquidando «A cien millas de Manhattan» de Fesser, una lectura adecuada para estos calores…bajo mi humilde, particular y particular punto de vista.
Hola Rafael:
Gracias por tu intervención… Por la variada selección de autores que señalas veo que tienes un gusto muy amplio de lectura, lo cual me parece un punto a tu favor en esto de opinar sobre la calidad de lo libros, debido a que hay gente que sólo lee lo que la TV dice que es “bueno” y nada más. En relación a Larsson y la influencia de su obra en los medios, el efecto no es igual para todos, pero es evidente de hubo y hay un efecto… yo me refiero precisamente a los “afectados”, así que por favor no te sientas aludido.;-).
Hola Charly:
Las monedas no solo tienen anverso y reverso, también tienen “cantos”… habrá que determinar lo que hay allí también ¿no?…gracias por pasarte y comentar.
Hola Juan Pedro:
Ya me he dado una vuelta por tu blog literario y te confieso que me has impresionado. Luego volveré con calma a curiosear.
Yo también disfruto con los extraterrestres cuando me “regañan” porque no he leído cierto libro. Por eso concuerdo que imposiciones, incluyendo las subconscientes, van en contra de la propia lectura… Nos leemos…
Hola Nacho:
Es cierto, la fama les ha quitado frescura… Y es por eso que decidí no leerlos… me gusta descubrir las cosas por mi mismo y no por que me lo dicen los demás. No dudo de quesean entretenidos, pero hasta allí merecen una opinión.
Hola Roy:
Es lo que tiene criticar que indirectamente crea publicidad. Saludos y gracias por pasarte y comentar.
Hola Agustí:
Muy interesante tu planteamiento, pues le da un vuelco al debate… Hay que saber que los criterios están siempre influenciados por el exterior y por los miles de estímulos que recibidos, así que concuerdo en que es difícil hablar sobre el tema.
Y si, uno y dos y tres millones de personas pueden estar equivocadas, ya ha sucedido y seguirá sucediendo…y todos esos ejemplos que señalas son una prueba viviente de lo que quiero transmitir. No he leído A cien millas de Manhattan, y como nadie me lo ha recomendado tal vez ahora lo busque para leer la sinopsis. Gracias por tus comments.
Saludos
SM
No hay problema. Tienes razón, y a mi es que también me gusta ir contra corriente. Y en este post la coriente sobre el libro está clara. Por cierto, hoy he tenido la primera convesación offline sobre el libro y tampoco ha sido muy interesante. Prefiero esta, aunque ya podrían haber comentado todos los que han leído el libro y el post. El debate hubiera sido interesante.
Para terminar, creo que todos tendríamos cierto interés en conocer a alguien como Lisbeth Salander.
Hola Rafael, gracias por unirte al debate. Pues la verdad es que el personaje de Lisbeth se está haciendo más famoso que el mismo Larsson y hasta están analizando su conducta y hablando de ella como si de verdad existiera, es que ha sido todo un fenómeno sin duda.
Saludos
SM
Y no leer el libro por ir en contra de la influencia mediática… ¿no es lo mismo que dejarse llevar?.
El libro no está mal, peores cosas me he llevado a los ojos (Dan Brown, sin ir más lejos).
Claro que yo me leo hasta el listín telefónico… otra cosa es que me guste.
Si un año de éstos tienes tiempo, termina el libro, tampoco morirás en el intento, aunque si no lo haces tampoco te pasará nada especial.
Otro tema es el de los lectores que, exclusivamente, han leido best-seller influidos por la publicidad. Y, claro, es normal que los que comenzarón (y terminaron) de leer con el Código da Vinci ahora alucinen en colores con Larsson. Allá ellos, que no saben todo lo que se pierden.
Hola Víbora, gracias por pasarte y comentar:
Bueno la respuesta a tu pregunta es no, sencillamente porque no se trata de una rabieta, sino de una decisión basada en gustos.
Otra cosa es que haya visto cierta manipulación por parte de los medios y no me haya gustado, pero en mi caso lo empecé a leer y no me gustó. No creo que lo retome, ya veré la peli si acaso…. tengo otros libros en mente, no tan famosos, pero si mejores que estos… eso es seguro.
Saludos
SM
Ni sabía de la existencia de Larrson y creo que sobreviviré, aunque me siento un sudaca al costado del mundo desarrollado. Menos mal que existe wikipedia para saber de qué se trata y tener dos o tres conceptos para poder meter algún bocadillo en alguna reunión de tinte intelectual !
Cómo anda la venta de autores sudamericanos ?
Hola Gabriel: Aquí han estrenado película y todo, así que seguro que ya llegará al cono sur en forma de tornado mediático… Sobre el desarrollo, no te creas, a veces es una parodia y se trata más de la buena administración de los recursos y la honestidad de las personas, eso es lo que marca a estos países y los convierte en prósperos… del resto el desarrollo es el mismo.
Saludos
SM
Querido buen lector de Barcelona,
Cierto es, Larsson no es el mejor escritor del mundo y posiblemente no se merezca tanto circo mediático cuando otros pasan desapercibidos.
Pero te diré una cosa, me parece un crimen que alguien se deje un libro a medias y después lo juzgue, 100 páginas no son nada de la saga completa: acábalo, leéte el segundo (que es estupendo), disfrútalo, y luego discutimos su inmerecida fama.
Un día cometí el error de leer el Código Da Vinci, sí, es predecible, aburrido y el final está cogido por los pelos. Pero puedo decirlo porque lo leí entero. Y permíteme la siguiente recomendación, lee a Larsson, no para comentarlo con nadie en una cola, sino para ti mismo, para pasar un buen rato, entretente. No dejes que una masa de lectores inexpertos que se creen inteelctuales te priven del placer de disfrutar de este best seller. No tengas miedo de que al final te guste.
Y por cierto, la película no le llega a los libros ni a la suela de los zapatos.
Hola Irene, de verdad que gracias por la recomendación, pero hay otro componente que me detiene además de los que menciono, y es que prácticamente ya me sé ya las tres historias de tanto que las escucho hablar en mi entorno… Creo que sencillamente no lo leeré.
Gracias por pasarte y comentar.
SM
Estoy de acuerdo contigo. Yo, como tú, soy un títere de los medios. Mis decisiones las determinan los medios: SI VEO QUE TODOS HABLAN DE UN LIBRO, YO NO ME LO LEO. Leerlo es de gente sin criterio.
En realidad, lo nuestro no es tan distinto de la gente sin criterio. Yo, simplemente, me creo mejor que la masa y con eso juzgo los libros que me leo.
Vaya colección de snobs envidiosos. Supongo que pensáis que estáis un escalafón por encima de los demás porque no vais a leer nada de Larsson. Que pena por favor.
“Aclaro que no tengo nada en contra de Larsson, pero si de la gente sin personalidad que hace las cosas porque las hacen los demás, y porque sienten la necesidad ser aceptados/as en esas conversaciones insulsas que se generan alrededor de temas como éste, y cuyo origen es la moda de turno.”
Senior, tu último párrafo caracteriza con claridad un aspecto básico de nuestro día a día, si se prefiere, un reflejo de nuestra sociedad. Además, parece que el hecho de no estar «integrado» o «a la última» conlleva algo mucho más peligroso de lo que creemos o de lo que realmente es y nos inhibe de una forma mucho más paralizante de lo que pensamos. Tanto en nuestras relaciones personales como en el entorno empresarial.
Senior, un saludo de un portugués apreciador de café (que no para todos…) y que día a día lucha por mantener su independencia e estabilidad moral y mental.
Muy sinceramente, poder leer y aprender de tus posts y de lo que compartes es todo un lujo!